El Museo de la Universidad de Alicante inició el proyecto expositivo «Del morado al negro. Violencia de género a través de la prensa gráfica alicantina» hace ahora diez años, una exposición que se ha consolidado como muestra de referencia en la denuncia de la violencia de género a través de fotografías de prensa.
En este décimo aniversario la Concejalía de Igualdad del Ayuntamiento de Alicante se suma a la iniciativa como coorganizadora de la exposición, que este será inaugurada el viernes 25 de noviembre, Día contra la violencia de género, en la Plaza de la Santa Faz a las 13 h.
Este año, y con motivo de su décimo aniversario, la exposición se presenta como una muestra-balance, en la que se recogen los casos de violencia de género registrados en la provincia de Alicante durante la última década, a través de una selección de fotografías de prensa expuestas en 32 lonas de gran formato. La exposición, que permanecerá hasta el 11 de diciembre en la Plaza de la Santísima Faz, reúne una selección actualizada de 32 imágenes que recogen la realidad de la violencia de género en su grado más extremo, el de los asesinatos machistas, que acaban con la vida de alrededor de 70 mujeres en España cada año.
A partir del 11 de diciembre, “Del morado al negro” se trasladará al Campus de la UA.
El comisario Ángel García asegura que son muchas las cosas que han cambiado en esta década de evolución y asegura que “Hace diez años, cuando preparaba la primera edición de Del morado al negro. Violencia de género a través de la prensa gráfica alicantina y tuve que entrar en fototecas de periódicos o pedir a mis colegas fotoperiodistas que buscasen en sus archivos, me costó encontrar imágenes de calidad para lo que en su día reunimos bajo el apartado denominado “reacción social”. Una década después, he tenido que hacer un esfuerzo para que esta edición no sea un monográfico de las múltiples maneras que tiene la sociedad española de solidarizarse con las víctimas, expresar su dolor, conmemorar el 25 de noviembre y educar para reducir la violencia contra las mujeres entre los jóvenes”.
García añade que esta exposición saldrá a la calle, será vista por muchas personas, se desplazará por toda la provincia y no será plato de buen gusto para nadie. Nos recordará momentos muy duros, abrirá momentáneamente viejas heridas y nos pondrá, como sociedad, frente al espejo. “Para eso sirve, entre otras cosas, el periodismo. Para recordarnos que no siempre seremos meros espectadores y que de nada sirve mirar hacia otro lado”